HOSPITALIDAD

HOSPITALIDAD, 

CONVIVENCIA Y CUIDADO DE OTROS

Un lugar de encuentro en  un clima de acogida y respeto

Cascadas quiere ser un lugar  donde las personas encuentren un clima de acogida y respeto,  de tal modo que se puedan sentir –en casa- en el sentido de experimentar  libertad para  ser, sentir y mostrarse como son, con transparencia y sencillez.

Compartimos la idea de que cada ser humano tiene un valor intrínseco y que en si mismo es un ser único y diferente de los demás. Desde este punto de partida queremos  mostrar una actitud abierta y respetuosa hacia las diferencias en cualquier ámbito: personal, social, cultural, religioso.

 Cada vez más, por el hecho de estar saturados de mensajes del exterior, estamos necesitados de un espacio personal donde podamos escucharnos a nosotros mismos en un ambiente sereno, cálido y  libre de interferencias. Por ello en Cascadas buscamos que los espacios físicos de la casa, el entorno y la acogida faciliten el contacto con uno mismo,  de tal modo que se experimente  un “sentirse en casa”, en el sentido de libertad para ser, sentir y mostrarse como uno es, con transparencia y sencillez.

Además,  pensamos que como seres humanos tenemos  la necesidad de un encuentro genuino con otros. Vamos perdiendo poco a poco  las oportunidades del contacto directo  y nuestras comunicaciones son cada vez mas virtuales, mas simplificadas y mediatizadas por las nuevas tecnologías. Vivimos cada vez mas en la paradoja de  estar desconectados  de  nosotros mismos y de los demás, en un mundo globalizado y en esencia mejor conectado  que nunca en su historia. Queda poco tiempo para compartir y cada vez  se experimenta mas la soledad.  

Nos resulta inspirador, como creyentes, observar  en los encuentros que Jesús tenía con cada ser humano,  una comprensión sensible e inteligente de cada  persona en un sentido profundo y global. En ellos se reconoce y valora  su identidad,  su historia  y sus circunstancias mas inmediatas: sus necesidades físicas, emocionales, espirituales..su libertad de elección. Por ello las personas se sentían frente a él,  dignificadas y retadas a la vez.

Valoramos especialmente desde Cascadas la necesidad del cuidado de personas que atraviesan  circunstancias  difíciles por muy diferentes motivos,  momentos en los que  es común  sentirse mas  frágil y vulnerable.  Es nuestro deseo  proporcionar espacios y encuentros en los que aquellos que suelen recibir ayuda pueden aportar de si mismos también a otros. De este modo estamos  ayudando  a generar  sentimientos de utilidad y capacidad,   facilitando así  la recuperación y el fortalecimiento, de modo que  cada persona pueda experimentar el haber recibido de otros y dado también de si misma.